La llegada de un nuevo miembro a la familia es sin duda uno de los momentos más increibles y mágicos de la vida.

Esos mofletes, sus deditos, su fina piel, ese pelito… La mejor forma de inmortalizar algo tan fugaz como la ternura y delicadeza de un recién nacido es con unas fotografías que os harán revivir una y otra vez aquellos primeros maravillosos primeros días en el calor y la comodidad de vuestro hogar. 

Te ofrezco los recuerdos que  conservarás como un tesoro para siempre: sin posados forzados con un estilo minimalista, atemporal y elegante. Mi compromiso es ofrecerte imágenes que reflejen la belleza del recién nacido y vuestra complicidad y felicidad por su llegada.